lunes, 29 de junio de 2009

Deforestación

La deforestación es el proceso de desaparición de los bosques o masas forestales, fundamentalmente causada por la actividad humana, tala o quema de árboles accidental o provocada. Está directamente causada por la acción del hombre sobre la naturaleza, principalmente debido a las talas realizadas por la industria maderera, así como para la obtención de suelo para la agricultura.
En los países más desarrollados se producen otras agresiones, como la
lluvia ácida, que comprometen la supervivencia de los bosques, situación que se pretende controlar mediante la exigencia de requisitos de calidad para los combustibles, como la limitación del contenido de azufre.
En los países menos desarrollados las masas boscosas se reducen año tras año, mientras que en los países industrializados se están recuperando debido a las presiones sociales, reconvirtiéndose los bosques en atractivos turísticos y lugares de esparcimiento.
Mientras que la tala de árboles de la pluviselva tropical ha atraído más atención, los bosques secos tropicales se están perdiendo en una tasa substancialmente mayor, sobre todo como resultado de las técnicas utilizadas de tala y quema para ser reemplazadas por cultivos. La pérdida de
biodiversidad se correlaciona generalmente con la tala de árboles.
Entre las causas directas más importantes de la deforestación figuran la conversión del bosque a la agricultura y a la cría de ganado, la urbanización y la construcción de carreteras, la actividad de las empresas madereras, la minería, la explotación petrolera, la construcción de oleoductos y gasoductos, la cría industrial de camarón (en el caso de los bosques de manglar), los incendios y la construcción de grandes represas hidroeléctricas. Las grandes plantaciones forestales para abastecer a diferentes industrias de materia prima barata, son también causa directa de deforestación en la medida que estos cultivos son precedidos generalmente por la corta del ecosistema forestal nativo.

Sin embargo, el verdadero motor, causante de que todas estas actividades se realicen en forma depredadora e insustentable es el modelo de "desarrollo" vigente. Este implica la explotación irrestricta de la totalidad de los recursos del planeta, con el objetivo de alimentar un siempre creciente mercado consumidor, en particular en los países del Norte industrializado. La desigualdad de los términos de intercambio entre el Norte y el Sur, que ha generado una creciente e impagable deuda externa que obliga a extraer y exportar cada vez más recursos, sólo para pagar sus intereses, ha acrecentado la devastación. El Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, los bancos multilaterales regionales y la Organización Mundial de Comercio han sido fundamentales en todo el proceso, impulsando y apoyando financieramente desde la construcción de carreteras y de represas hidroeléctricas, hasta forzando a los gobiernos a centrar sus esfuerzos en orientar la producción hacia la exportación, con el objetivo de poder cumplir con el servicio de la deuda externa. Además, el ajuste estructural impuesto por esos organismos ha implicado el "achique" del Estado, una de cuyas consecuencias ha sido la falta de recursos humanos y financieros a nivel del Estado para atender a la protección y manejo sustentable de los bosques.
En la mayoría de los casos estas causas tienen que ver con estrategias macroeconómicas que ofrecen fuertes incentivos para la obtención de ganancias a corto plazo en lugar de buscar la sustentabilidad a largo plazo. También son importantes las estructuras sociales profundamente arraigadas que provocan desigualdad en la tenencia de la tierra así como discriminación de los pueblos indígenas, de los agricultores de subsistencia y de los pobres en general. En otros casos incluyen factores políticos tales como la falta de democracia participativa, la influencia de los militares y la explotación de zonas rurales por élites urbanas.
Consecuencias
son muchas y variadas, afectando todo tipo de especie y hábitat produciendo un alarmante desequilibrio ecológico.
Una de estas consecuencias es la desaparición de sumideros de dióxido de carbono, reduciendo así la capacidad del medio de poder absorber dicho CO2 para convertirlo en oxígeno y así llevar a cabo el efecto invernadero.
Además, al realizar tanto quema como tala indiscriminada se produce obligatoriamente un cambio en los suelos que luego alterará directamente el clima del lugar al quedar con menor cantidad de retención de humedad, provocando de esta manera sequías.

cuidar nuestro hogar ,el planeta tierra, no es tarea de unos cuantos sino de todos así que debemos tomar conciencia sobre todas nuestras acciones ya que repercuten en la conservación de todos los recursos presentes en el medio ambiente.

1 comentario:

  1. CALIFICACION:

    WENDY: 5
    NICODEMO: 5
    JAIRO: 5
    ANGELICA: 5
    FREDY: 5

    CHICOS, ESTOY TOTALMENTE DESILUCIONADA DE USTEDES, COMO PUDIERON ENTREGAR UN CD EN BLANCO, SABIENDO QUE LA INVESTIGACIÓN TENÍA VALOR DE 50%??????

    LOS ESPERO EL LUNES A LAS 7 DE LA MAÑANA PARA QUE REALICEN EL EXAMEN DE RECUPERACIÓN CON LOS TEMAS QUE DESARROLLARON EN SU BLOG.

    MUCHA SUERTE!!!!

    Biol. Rosario López M.

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